La cruz siempre significó maldición hasta el día en que Cristo murió por la humanidad. Sí, allí en la preciosa cruz, fue donde se escribió la historia de un hombre que cargó por nosotros el pecado del mundo. Cuando tu y yo debíamos estar colgados en esa cruz, Cristo tomó el lugar. Lo hermosa de esta historia es que al tercer día este hombre, el Hijo de Dios, resucitó. Se levantó con poder y gloria para que todo aquél que en El cree no se pierda mas tenga vida eterna (Juan 3:16).
Allí en la cruz, allí fue donde fue molido por nuestros pecados, donde el mismo Jesús clamando al cielo dijo, en tus manos encomiendo mi espíritu, cerrando con poder y gloria el proceso que nos llevaría a la patria celestial. Cuando se levantó, comenzó una nueva era de gracia, donde la humanidad a través de Cristo volvió a tener acceso al Padre. Donde una humanidad sin remedio recibió la redención. Claro, todo si le aceptamos y vivimos por Él y para Él.
Cuando miro la cruz veo la mayor muestra de amor, veo cómo nosotros tan insignificantes, fuimos comprados a precio de sangre real. Cuando miro la cruz solo pienso en aquellos que aún no han experimentado lo que sucedió en aquel lugar. Cuando miro la cruz creo en ese día, en el que pronto vendrá. Cuando miro la cruz solo puedo pensar que es necesario mirar la cruz. Es necesario caminar viendo la cruz, es necesario aceptar la cruz, es necesario entender que la cruz fue cubierta con sangre para que tú y yo fuéramos cubiertos del amor del que vive y vendrá pronto.
No sé que vez tu en esa cruz, pero yo veo la oportunidad de que mi vida sea cada vez mejor, la oportunidad de un día verle cara a cara. Ver al caballero de la cruz.
Comments